¡Podemos viajar sin destruir el mundo!

Net Zero es factible para 2030, pero requiere de un gran esfuerzo. Jeremy Sampson, director ejecutivo de Travel Foundation, presentó un camino hacia la neutralidad climática en la ITB Berlín 2024 y pide al sector turístico realizar correcciones de rumbo más consistentes.

“Descarbonizar el mundo, con o sin nosotros”, como afirmó Sampson. Su estudio, titulado “Envisioning Tourism in 2030 and Beyond”, proporciona un modelo para lograr la neutralidad climática. 

El crecimiento masivo del turismo mundial conducirá a un enorme aumento de las emisiones si el enfoque sigue siendo el de siempre, como enfatizó durante el Future Track en la ITB.

“Debemos permitir que las áreas respetuosas con el medio ambiente se expandan y restringir aquellas que lo dañan”. El objetivo principal aquí es regular los viajes aéreos.

La base del estudio de Travel Foundation la proporciona una combinación de 40 medidas divididas en seis categorías:

• Compensación de los gases de efecto invernadero 

• Electrificación y una oferta más eficiente

• Desarrollo de infraestructuras para proteger el clima 

• Desarrollo de combustibles sostenibles

• Imposición de impuestos y tasas 

• Promoción selectiva de comportamientos de viaje más respetuosos con el medio ambiente 

Sampson cree que el objetivo de cero emisiones netas realmente se puede lograr si se combinan esfuerzos sistemáticos para implementar todas las medidas necesarias.

Según Sampson, basándose en el crecimiento previsto, solo hay un escenario que puede permitir alcanzar el objetivo de cero emisiones netas para 2050. Serán necesarios cambios de gran alcance, por ejemplo en términos del comportamiento de los viajes y la estructuración de la oferta. 

Estos incluyen la reducción de las distancias recorridas y de la expansión de los viajes aéreos, mayor expansión de los viajes terrestres, limitación de los vuelos de larga distancia a los niveles de 2019 y el uso de energía 100% renovable en instalaciones de alojamiento, automóviles, etc. 

Además, es necesario invertir en infraestructura y tecnología para que los viajes sean respetuosos con el clima.

En 2019, los viajes aéreos representaron sólo el 2% de todos los viajes y, al mismo tiempo, produjeron las mayores emisiones de CO2. Si no se imponen restricciones, el número de vuelos se cuadruplicará para 2050, lo que representará el 41% de las emisiones totales del turismo. 

Solo hay dos opciones para regular las emisiones del turismo: frenar sistemáticamente el turismo global o una introducción igualmente sistemática de viajes netos cero.

(Foto: cortesía ITB Berlín)